domingo, 7 de abril de 2019

MATEOS: "VIEJO COCHE" Y"VIEJO COCHERO" LETRAS GEMELAS: TESTIGOS DE ÉPOCA.-

                       "Se fue Mateo", "El pescante" y los dos tangos mencionados en el título no son los únicos pero si los paradigmáticos de un medio de transporte y  su época de esplendor; medio de transporte llamados coches victoria entonces, dedicados al transporte de personas,con tracción por equinos y limitado su uso a sectores sociales de nivel económico medio-alto y más.-
                        La inflexión que introdujo la llegada de los vehículos motorizados se establece a partir de mediados de los años 20, cuando la importación ( de autopartes y su ensamblado en el país en algunos casos) de vehículos automotores cada vez más variada y masiva desplaza a estos carruajes no sin traumáticas consecuencias que el tango refleja como nadie.-
                   "Mateo", el grotesco de Armando Discépolo refleja tempranamente en 1923 lo comentado.- "Mateo" es el nombre del caballo del carruaje con que Miguel (inmigrante italiano, habitante junto a su esposa e hijos de un clásico conventillo porteño de principios de siglo) se gana la vida y encamina a sus hijos jóvenes en un momento de crisis terminal de su oficio de cochero; el automotor y sus choferes desplazan lenta e inexorablemente el trabajo de carruajes y cocheros; la obra es un gran éxito en plena inflexión del desarrollo de los medios de transporte urbanos en la babélica Buenos Aires del primer cuarto del siglo XX.-
                      Miguel lucha contra la miseria que lo acosa en su diario vivir y que sabotean  los proyectos de vida para sus hijos que crecen: la salida rápida y tentadora a través del camino del delito lo subyugan y atormentan.- Más profundo aún, dialoga con su caballo Mateo en escena y los caminos se angostan aunque habrá una salida; entre ellas una de simbólico sentido; uno de su hijos (Carlos, el mayor) conseguirá trabajo de chofer de vehículos .- Abundan personajes dedicados al robo que se ofrecen como modelos de  salida ante la crisis de familia y existencial del cochero en retirada y su familia desorientada y crítica del padre-cochero.-
                Mateo, el nombre en la obra de 1923 del caballo del cochero Miguel pasa a ser un sustantivo común en la cultura porteña; mateos serán los carruajes en si y de ésta manera no morirán jamás; subsisten como transportes ligados al paseo recreativo aún en el mundo entero, en grandes ciudades y en pueblos.- 
                     Los tangos mencionados tienen un hilo conductor más allá de la temática, los personajes y su exposición; y está contenido (ese denominador común) en las trabajadas metáforas expuestas en las letras, el clima hondamente humano y tanguístico que las une y señalaremos a continuación:
"Viejo coche" de Enrique C. Flores (1926) "Eras nuevo, y lustroso...." "Viejo coche, quien diría,/ que a larga 
  rodarías / como también rodé yo...".- "Y al tranco de tu caballo/ ya también viejo y cansado/ eramos naipes marcados/ en el naipe del vivir".- Cansancio, fracaso, desesperanza e infortunio en el cochero sin futuro y en el dicente (cliente del coche) con el plus del fracaso sentimental que también se menta en la letra de  Flores.-
                      "Se fue Mateo" tango de 1926 también,  de Alfredo Bertonasco que en la línea del anterior dice: "Mateo/ te gritan de cualquier parte/ y vos tenés que ladearte/ para dar paso al motor.".- Ya Mateo es el vehículo mismo, aún el conductor, quien regresa a su pieza sin tener qué comer y peor aún, su hija Consuelo le dejó una carta donde anuncia que "anoche levantó vuelo/ con su vecino el chofer".-
                       "Viejo cochero", de Horacio Sanguinetti va por el mismo camino al expresar: "Mateo/ apartate de la vía/ y dejá paso al progreso/ hoy te grita la ciudad".- Mismo clima envuelve al desventurado cochero: Anoche le llovía tu capota/ lo mismo que a tu alma tan cansada...."Sentado en el pescante de tu coche/ tenías frío y muchas ganas de dormir/ esperando levantar un triste viaje/ no soñabas que te ibas a morir".-  
                  "El pescante" (1934) de Homero Manzi ,es tardío en la línea mostrada por los anteriores, pero si profundo  y elíptico ante un tema de decadencia ya expuesto en letras anteriores: "Vamos,cargao de sombra y recuerdo/ vamos/ atravesando el pasado"; "Vamos/  al son de tu tranco lerdo/ vamos/camino l tiempo olvidado".- Hay otros rasgos en común en éstas letras, la piedad y humanidad ante los briosos animalitos que ya no representan lo que fueron en momentos no tan lejanos; también la ausencia de odio o represalia ante la modalidad del transporte que prontamente se impondrá sin remedio en ciudades de todo el mundo.-
                   En resumen, el ocaso de un oficio en un momento preciso y reconocido, coincide con la desesperanza personal ante lo inevitable y enraiza con un rasgo típico del tango y sus arquetipos letrísticos: la desesperanza, el fracaso, la desventura y el destino que tanta incidencia tienen en las letras de tango en general desde siempre.-mc